Omita y vaya al Contenido
     

Calambre muscular

Definición: Es el nombre común de un espasmo muscular, especialmente en la pierna. Los espasmos musculares se pueden presentar en cualquier músculo del cuerpo. Cuando un músculo está en espasmo, se contrae sin su control y no se relaja.

Causas

Los espasmos musculares a menudo se presentan cuando un músculo está sobrecargado o lesionado. El hecho de hacer ejercicio cuando usted no ha tomado suficientes líquidos (estando deshidratado) o cuando tiene bajos niveles de minerales, como potasio o calcio, también puede hacerlo más propenso a sufrir espasmos musculares.

Algunos espasmos ocurren debido a que el nervio que se conecta a un músculo se irrita. El ejemplo clásico de esto es una hernia discal que irrita los nervios raquídeos a medida que salen de la espalda, produciendo dolor y espasmo.

Los espasmos en la pantorrilla ocurren comúnmente al patear durante la natación y también se pueden presentar en la noche mientras usted está en la cama. Los espasmos de la parte superior de la pierna son más comunes con actividades como correr o saltar. El espasmo en el cuello (columna cervical) puede ser un signo de estrés.

Síntomas

Cuando se presenta un espasmo muscular, el músculo se siente muy tenso y algunas veces se describe como un nudo. El dolor puede ser intenso.

Pruebas y exámenes

El médico puede diagnosticar los espasmos musculares por la presencia de músculos tensos o duros que son muy sensibles al tacto. No existen estudios imagenológicos ni exámenes de sangre que puedan diagnosticar esta afección. Si la causa del espasmo es la irritación de un nervio, como sucede en la espalda, una resonancia magnética puede servir para encontrar la causa de dicha irritación.

Tratamiento

Al primer signo de espasmo muscular, suspenda la actividad e intente estirar y masajear el músculo afectado. En un principio, el calor ayuda a relajar el músculo, aunque la aplicación de hielo puede servir después de presentarse el primer espasmo y cuando el dolor haya mejorado. Si el músculo aún sigue dolorido, los medicamentos antinflamatorios no esteroides pueden ayudar con el dolor. En casos más graves, el médico puede prescribir medicamentos antiespasmódicos.

Después de recibir tratamiento, el médico debe buscar la causa del espasmo para evitar que se vuelva a presentar. Si existe compromiso de un nervio irritado, podría ser necesario recurrir a la fisioterapia o incluso a una cirugía.

La causa más común de calambres musculares durante actividades deportivas es la deshidratación y, a menudo, tomar agua o bebidas para deportistas los aliviará. Sin embargo, tomar agua sola a veces no es suficiente. Las sales efervescentes o las bebidas para deportistas que pueden reponer los minerales perdidos pueden ayudar.

Pronóstico

Los espasmos musculares mejorarán con reposo y tiempo y su pronóstico es excelente para la mayoría de las personas. Las técnicas de entrenamiento apropiadas deben evitar que los espasmos se presenten de manera regular. Si la causa de un espasmo ha sido un nervio irritado, se podría necesitar más tratamiento y los resultados pueden variar.

Cuándo contactar a un profesional médico

Si tiene un espasmo muscular con un dolor intenso, consulte con el médico. Igualmente, póngase en contacto con el médico si presenta debilidad con el espasmo muscular.

Incluso, si los espasmos no son intensos, el médico le puede ayudar a cambiar el programa de ejercicios para reducir el riesgo de espasmos musculares en el futuro.

Prevención

  • Hacer estiramiento para mejorar la flexibilidad
  • Cambiar las sesiones de entrenamiento para ejercitarse dentro de las capacidades
  • Beber mucho líquido mientras se hacen ejercicios e incrementar la ingesta de potasio (el jugo de naranja y los bananos son excelentes fuentes de este elemento).

Referencias

Brinker MR, O’Connor DP, Almekinders LC, et al. Physiology of Injury to Musculoskeletal Structures: 1. Muscle and Tendon Injury. In: DeLee JC, Drez D Jr, Miller MD, eds. DeLee and Drez’s Orthopaedic Sports Medicine. 3rd ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2009:chap 1, section A.

Geiderman JM, Katz D. General principles of orthopedic injuries. In: Marx JA, Hockberger RS, Walls RM, et al, eds. Rosen’s Emergency Medicine: Concepts and Clinical Practice. 7th ed. Philadelphia, Pa: Mosby Elsevier; 2009:chap 46.

Ronthal M. Arm and neck pain. In: Bradley WG, Daroff RB, Fenichel GM, Jankovic J, eds. Neurology in Clinical Practice. 5th ed. Philadelphia, Pa: Butterworth-Heinemann; 2008:chap 32.