Definición: Es una cirugía que se hace para tratar el aumento de líquido cefalorraquídeo (LCR) en el cerebro (hidrocefalia).
Este artículo aborda este tipo de cirugía en niños.
Este procedimiento se hace en el quirófano bajo anestesia general y demora aproximadamente 1 ½ horas.
Se rasura un área de cabello en la cabeza del niño. Esto puede ser por detrás del oído o en la parte superior o por detrás de la cabeza.
El cirujano hace una incisión o corte en forma de herradura (forma de U) por detrás del oído. Se hace otra incisión quirúrgica pequeña en el abdomen del niño.
Se perfora un agujero pequeño en el cráneo y se pasa un pequeño tubo delgado denominado catéter hasta un ventrículo en el cerebro. Esto se puede o no hacer con la guía de una computadora. También se puede realizar con un endoscopio que permite ver dentro del ventrículo.
Se coloca otro catéter bajo la piel desde la parte posterior del oído, bajando por el cuello y el pecho, y por lo general hasta el área abdominal. Algunas veces, este catéter se detiene a la altura del área del tórax. El médico puede hacer un pequeño corte en el cuello para ayudar a posicionarlo.
Se coloca una válvula (bomba de líquido) bajo la piel por detrás del oído y ésta va conectada a ambos catéteres. Cuando se acumula presión adicional alrededor del cerebro, la válvula se abre y el líquido excedente sale de éste hacia el área del tórax o el abdomen. Esto ayuda a disminuir la presión intracraneal.
Las válvulas en las derivaciones más nuevas se pueden programar para drenar más o menos líquido desde el cerebro.
Esta cirugía se realiza cuando uno tiene demasiado líquido cefalorraquídeo (LCR) en el cerebro y la médula espinal, lo cual se denomina hidrocefalia. Ésta causa presión superior a lo normal en el cerebro y puede ocasionar daño cerebral.
Los niños pueden nacer con hidrocefalia. Se puede presentar con otros defectos congénitos de la columna vertebral o del cerebro.
La cirugía de derivación se debe hacer tan pronto como se diagnostique la hidrocefalia.
Los riesgos de cualquier anestesia son:
Los riesgos de cualquier cirugía son:
Los posibles riesgos de la colocación de una derivación ventriculoperitoneal son:
La derivación puede dejar de funcionar. Si esto sucede, el líquido comenzará a acumularse en el cerebro de nuevo.
Si el procedimiento no es una emergencia (cirugía planeada):
Pregúntele al médico o enfermera respecto al hecho de comer y beber antes de la cirugía. Las pautas generales son:
El médico puede pedirle que bañe al niño con un jabón especial en la mañana de la cirugía. Enjuáguelo bien después de usar este jabón.
Su hijo necesitará permanecer acostado en posición horizontal durante 24 horas la primera vez que le coloquen una derivación. Después de eso, le ayudarán a sentarse.
El niño probablemente permanecerá hospitalizado por 2 a 4 días y el equipo médico le realizará un monitoreo cuidadoso.
El niño recibirá:
La colocación de una derivación generalmente es efectiva para reducir la presión en el cerebro. Pero si la hidrocefalia se relaciona con otras afecciones, como la espina bífida, tumor cerebral, meningitis, encefalitis o hemorragia, estas enfermedades podrían afectar el pronóstico. La severidad de la hidrocefalia presente antes de la cirugía también afectará el pronóstico.
Hay grupos de apoyo disponibles en la mayoría de las áreas para las familias de niños con hidrocefalia o espina bífida.
Las mayores complicaciones de las cuales se debe estar pendiente son una derivación infectada y un bloqueo de la derivación.
Derivación ventriculoperitoneal; Fístula VP; Revisión de derivación
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